El Gobernador de Colchagua junto al Seremi de Bienes Nacionales Christian Villegas, entregaron al municipio de Chimbarongo la concesión por 5 años de una ex casa Cema Chile, para concretar la ampliación del Centro Parvulario que cuenta actualmente con una matrícula de 80 niños.

La propiedad, colindante con el establecimiento educacional de más de 460 metros cuadrados, servirá para el trabajo docente, habilitar más salas de clases y lugares donde se desarrollen diversas labores en pos de la buena educación entregada a los niños chimbaronguinos.

Al respecto, el Seremi Villegas expresó su satisfacción por la finalidad que se dará a la nueva propiedad municipal: “estamos muy contentos de hacer esta entrega, que va muy acorde con lo encomendado por el Presidente Sebastián Piñera: poner a los niños primero en la fila. Este establecimiento podrá ampliarse, dando un buen uso a esta ex propiedad Cema”.

Por su parte, el Alcalde Marco Contreras, manifestó su gratitud por el traspaso de esta propiedad al municipio: “Sin duda para el Centro Parvulario significa un enorme avance proyectar el establecimiento de manera de poder cumplir el deseo de muchas familiar de poder educar aquí a sus niños, en su primera etapa escolar. Agradezco al Seremi de Bienes Nacionales y al Ministro de la cartera por habernos entregado el uso gratuito de este inmueble que nos permitirá ampliar y mejorar el centro. También, agradezco la valiosa colaboración del diputado Javier Macaya en estas gestiones que hoy, rindieron buenos frutos”.

Finalmente el Gobernador Yamil Ethit, puntualizó que “queremos fortalecer la educación temprana y qué mejor que hacerlo entregando un bien fiscal, para ampliar la capacidad de este establecimiento educacional”.

La ceremonia fue adornada con una presentación artística de los niños preescolares chimbaronguinos y contó con la presencia de diversas autoridades, como el senador Juan Pablo Letelier y el Director Provincial de Educación Alejandro Riquelme.

En los próximos meses se iniciarán los arreglos, reparaciones y adecuaciones que la propiedad necesita, para recibir a los niños.